- “La verdad es que no nos dio pereza. Nos hablaron tan bien de las misiones y de lo bien que se lo pasan los niños, que no dudamos en apuntarnos. Esperábamos vivir la Semana Santa de una manera más especial”.
- “Los niños dieron un ejemplo a los mayores de cómo hay que misionar. Se lo pasaron pipa y la gente reacciona de otra forma cuando se acercan ellos”.
- “La reacción de la gente en general fue bastante buena, sorprendidos y a la vez agradecidos cuando les regalaban un rosario o una cruz”.
Su destino, unas misiones urbanas en la propia ciudad de Valencia, en la parroquia de Mártires Valencianos, cuyo párroco es el P. Vicente Cortina, L.C. Inmaculada y César tienen una niña de 6 años, Mariam, que por lo que nos cuentan se lo pasó “pipa” y fue de esos misioneros que abren los corazones más cerrados. Así nos lo explica Inmaculada: “Hoy en día sí que es un poco complicado hablar a la gente de Dios, y más si los que hablamos somos los adultos. En cambio, cuando son los niños, todo cambia… la coraza parece que cae…”. Inmaculada nos cuenta su testimonio en esta entrevista.
¿Cómo habéis conocido familia misionera? ¿Qué esperabais encontrar en esta experiencia?
Conocimos Familia Misionera a través de una gran amiga. Lo que esperábamos encontrar era vivir la Semana Santa de una manera más especial y no como unas vacaciones más y poderlo compartir con otras familias con valores similares a los nuestros.
Lo que esperábamos encontrar era vivir la Semana Santa de una manera más especial y no como unas vacaciones más
Teniendo una niña pequeña y tan cerca de la playa… ¿no os dio pereza ir de misiones en una parroquia en el mismo Valencia en vez de ir a la playa a desconectar? ¿Cuál crees que es la actitud con la que hay que ir a misionar?
La verdad es que no nos dio pereza. Nos hablaron tan bien de las misiones y de lo bien que se lo pasan los niños, que no dudamos en apuntarnos.
La actitud con la que hay que ir a misionar es con la de los niños: con el corazón abierto, con espontaneidad y naturalidad. La verdad es que los niños dieron un ejemplo a los mayores. Se lo pasaron pipa y la gente reacciona de otra forma cuando se acercan los niños. Se muestran más abiertos y receptivos.
¿Es difícil hablar a las personas de Dios y más en una ciudad que además es la tuya? ¿Qué os decía la gente? ¿Entendían que sois católicos y de la parroquia?
Hoy en día sí que es un poco complicado hablar a la gente de Dios, y más si los que hablamos somos los adultos. En cambio cuando son los niños, todo cambia… la coraza parece que cae… lo pudimos comprobar cuando misionamos. La reacción de la gente en general fue bastante buena, reaccionaban sorprendidos y a la vez agradecidos cuando les regalaban un rosario o una cruz por ejemplo.
La actitud con la que hay que ir a misionar es cómo actúan los niños: con el corazón abierto, con espontaneidad y naturalidad.
¿Cristo actúa a través de los misioneros? ¿Crees que cambiaste la vida de otros para Cristo o al revés: que fue Cristo quien cambió la vuestra?
Cambiar la vida de otros para Cristo no sé si la cambiamos, lo que sí sé es que Él me cambio la mía no hace mucho tiempo y la de mi marido está en proceso, jeje…
¿Y vuestra hija cómo lo vivió?
Nuestra hija se lo ha pasado genial, ha disfrutado un montón. Toda la familia hemos vivido intensamente esta Semana Santa. Recomendable al 100% la experiencia de Misiones.